martes, 4 de enero de 2011

¡MILENARISMO!

Ha llegado el mileranismo. Este era el grito etílico de un Fernando Arrabal en su participación en un programa televisivo, creo, de los ochenta. Unámonos todos a su voz. Ha llegado el fin de los tiempos. Catástrofes, epidemias y desgracias de toda clase inundarán nuestro planeta. Plagas más dañinas que las recogidas en los textos bíblicos, tendrán su mortífero efecto en nuestros seres queridos. Este mundo no volverá a ser el mismo.
El anuncio de los más terribles males nos lo trae el eclipse de sol... Un momento, pero sí este eclipse se ha quedado en nada. Ha sido tempranísimo, cuando el sol no se sitúa en lo más alto del cielo. Ni siquiera ha sido completo, y con una niebla que disminuía su aterrador mensaje.
Este eclipse con gran timidez no se ha asomado apenas. No ha querido que nadie se burlara de él. Le entiendo perfectamente. Con esta crisis que llevamos encima, nada nos asusta ya. Además, con la subida de la luz, muchos nos vamos a acostumbrar a la oscuridad de la casa.

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